A través del cristal ella observa los quehaceres cotidianos de aquellos que aún no conocen el secreto.
A veces se pregunta si sería mejor no saberlo...La responsabilidad que le da conocerlo...A veces se pregunta si vale la pena...
Atardece, y como cada día, ella se viste para la ocasión, que le espera esta vez? Algo le dice que será un largo viaje, así que coje fruta, chocolate, y se dispone a ponerse en marcha.
La luz púrpura entra por sus ventanas, la mira fijamente, como si desde ésta, pudiera ver algo que nos está vedado al resto de los mortales.
Allí, a lo lejos, entre el púrpura y el naranja, está la puerta que cruza todas las noches desde hace ya casi tres primaveras. Y allí es donde se dirige ahora, impaciente por ver a sus companyeros de andanzas.
To be continued...
Friday, April 20, 2007
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